Para cuidar un árbol de pomelo, se recomienda:

• Ubicación: Plantarlo al exterior, en un lugar con pleno sol y protegido del viento. 

• Suelo: Utilizar un suelo fresco, arenoso, bien drenado, con un pH entre 6 y 7. 

• Riego: Regar con frecuencia y en abundancia, evitando que la tierra se seque demasiado o se encharque. 

• Abono: Abonar con abonos orgánicos como humus de lombriz, guano o estiércol, desde principios de primavera hasta finales de verano o principios de otoño. 

• Poda: Podar a finales del invierno, antes de que el árbol reanude su crecimiento. 

• Protección: Protegerlo de plagas como la araña roja, la cochinilla algodonosa y el minador de los cítricos. 

• Enfermedades: Protegerlo de enfermedades como el virus y tiroides y la phytopthora. 

Se recomienda plantar el árbol en la primavera, cuando las heladas hayan pasado y las temperaturas comiencen a subir. 

El pomelo es un árbol que puede vivir más de 50 años en condiciones ideales.